Llegamos a una nueva semana de noviembre, con la recta final del mes cada vez más cerca, y con nuestro marcador de precipitaciones muy raquítico (en la capital no ha caído prácticamente nada). Y es altamente preocupante que sigamos dando previsiones con lo mismo desde hace tanto tiempo, resumido todo en sol y temperaturas altas de día y, más o menos, bajas por la noche.
Esta vez no vamos a separar la previsión por días porque para lunes, martes y miércoles es calcada. Así que en vez de explicar lo mismo tres veces, pues lo hacemos en una y eso que ahorramos 😉 Y es que con el anticiclón invaribale en su posición, no podemos esperar otra cosa que un tiempo absolutamente estable que se va a traducir en cielo despejado los tres días, salvo el miércoles por la tarde que veremos aumentar las nubes de tipo alto por el oeste de la provincia sin más consecuencia que la de dejar un cielo más blanquecino.
Los tres días el viento va a estar en calma, si acaso flojo de componente variable (con predominio del E-SE a primeras y últimas horas del día y cierto SW el miércoles por la tarde). Las temperaturas tampoco van a cambiar en estos próximos días, hablamos de mínimas que seguirán dejando heladas en puntos de La Mancha y el área de Puebla de Don Rodrigo pero, a cambio, máximas disparadas por encima de los 17ºC a 19ºC en la práctica totalidad de comarcas ciudarrealeñas:
Estamos muy pendientes de la evolución de las bajas presiones atlánticas porque los modelos juegan a meternos precipitaciones (y quitárnoslas) para finales de semana, especialmente a partir del sábado. La incertidumbre es alta y estamos en la cuerda floja (el NW del país sí tiene esa lluvia más garantizada), pero habrá que seguirlo para ver si, por fin, podemos usar otra vez el símbolo de la lluvia en nuestros mapas. Eso si, en caso de alcanzarnos se ve que sería algo débil y pasajero, no nos vamos a hacer ilusiones. Como siempre, será algo que vayamos comentando por aquí pero también en Twitter y Facebook 😉